El Financiero, primavera 2009

Marvella Colín

La alta demanda por productos del mar en esta temporada de Cuaresma genera un aumento considerable en los precios de pescados y mariscos, ello pese a que en esta temporada los productores cuentan con producción suficiente para abastecer el mercado.

Para algunas especies de prevé una ligera disminución en su producción (calamar, atún cultivado y otras), en tanto que para el resto se espera mantener los mismos niveles, con ligeros incrementos en túnidos de captura, camarón, mojarra y pulpo.

A pesar de la abundancia de recursos pesqueros, los precios al consumidor de pescados y mariscos se encarecen de manera significativa en la temporada de Cuaresma, con aumentos que van de 30 hasta 135 por ciento, en especial si se hacen comparativos con los precios ofrecidos en las principales tiendas de autoservicio.

Tradicionalmente en América Latina se consume más pescado que en cualquier otra época del año.; no obstante, los altos precios tienden a limitar su consumo.

De hecho entre 2006 y 2008 el consumo per cápita de pescado se ha estancado en 13 kilogramos, el cual está por debajo de los 15.5 kilos observado en los inicios de los años 90.