Retroalimentación

¿Elegiste al líder A en la mayoría o en todas las situaciones?

El líder A está ejerciendo su habilidad para:

• Inspirar a otros. Los líderes efectivos inspiran a otros al elaborar y comunicar una visión para el grupo u organización, es decir una idea de su futuro; y al compartir la estrategia para alcanzar un conjunto de metas generando así la motivación necesaria.
• Motivar a los demás. Los líderes efectivos motivan a los demás al proporcionar un ejemplo sólido (demostrando integridad, ética, inteligencia, confianza en sí mismos y valor), al recompensar el desempeño y al ofrecer a los seguidores un propósito por el cual deseen trabajar.
• Hacer preguntas y proponer desafíos. Los líderes efectivos no sólo se conforman con el statu quo o la situación actual. Se preguntan qué se hizo antes y buscan formas de mejorar. También alientan a los subordinados a hacer lo mismo, asegurando que se fomente la innovación y la creatividad.
• Tomar riesgos calculados. Los líderes efectivos entienden que en ocasiones el enfoque seguro no es el mejor. Toman riesgos y, cuando fallan, aprenden de sus errores.
• Empoderar a otros. Los líderes efectivos no acaparan todo el poder; confían a sus empleados el poder y la autoridad para completar su trabajo.
• Garantizar la rendición de cuentas. Los líderes efectivos saben cómo proporcionar recompensas a sus empleados por alcanzar las metas, pero también saben cómo responsabilizarse a sí mismos y a los demás cuando no lo hacen.

Visión: una declaración que guía a una organización en su camino hacia el futuro; esa declaración expresa aspiraciones de lo que una organización desea ser y lograr.

Retroalimentación

¿Elegiste al líder B en la mayoría o en todas las situaciones?

El líder B podría mejorar su habilidad para:

• Inspirar a otros. Los integrantes del grupo u organización pueden sentirse poco involucrados o desanimados a alcanzar la visión si la consideran ajena o lejana a ellos. Para ser efectivo, un líder debe indagar las inquietudes del grupo sobre su visión de la organización para involucrarlos en ella e inspirarlos a alcanzarla.
• Motivar a los demás. Al tener contacto sólo con una parte del equipo (los supervisores, por ejemplo) el líder se desvincula del resto del grupo, perdiendo la oportunidad de "mostrar el camino" y premiar el trabajo bien realizado. Para ser efectivo un líder proporciona un ejemplo sólido (de integridad, ética, inteligencia, confianza en sí mismo y valor), y se acerca a su equipo para recompensarlo cuando sea conveniente.
• Hacer preguntas y proponer desafíos. Conformarse con el statu quo o situación actual, limita la visión del líder y lo condena a repetir errores o patrones poco efectivos. Para obtener nuevos y mejores resultados, el líder efectivo debe cuestionar la situación actual, valorar el pasado y abrir su mente a la innovación y creatividad, impulsando a su equipo a hacer lo mismo.
• Tomar riesgos calculados. Para ser efectivo, el líder debe impulsarse a sí mismo y al grupo a evaluar críticamente las situaciones que enfrenta y atreverse a correr ciertos riesgos.
• Empoderar a otros. Cuando un líder prefiere mantener las decisiones y el poder bajo su mando limita las capacidades y libertades del grupo para realizar su trabajo. El líder efectivo delega en los miembros de su equipo el poder y la autoridad necesarios para que logren su mejor desempeño.
• Garantizar la rendición de cuentas. Responsabilizar a los empleados por las omisiones o errores es importante, pero aún más importante es recompensar el trabajo bien hecho. Para ser efectivo, este líder debe recompensar a sus empleados por alcanzar las metas y procurar ser amable y respetuoso cuando los responsabiliza por no alcanzarlas.