Cada joven vive de forma distinta el bachillerato. Para algunos, adaptarse a este nivel educativo es muy problemático, ya que a las exigencias académicas se suman los cambios propios de la adolescencia y las demandas familiares de responsabilidad y madurez. En esas condiciones es fácil que surjan los problemas, y se vuelve indispensable ayudar a los jóvenes para que construyan estrategias de resolución de problemas o fortalezcan las que han utilizado anteriormente. Es importante que usted detecte la forma en que su hijo se está acoplando al nuevo ambiente y que lo apoye desde el entorno familiar.

A continuación le sugerimos algunas acciones que pueden ayudarlo a comunicarse mejor con su hijo, detectar si tiene problemas y apoyarlo en la resolución de estos.